resguardar mi espalda

 (11 de septiembre del 2019)

Tenía pensado hoy cerrar los ojos y hacer de cuenta que no me estás mirando pero en el proceso de meditarlo me vi consciente de que si nublo mi vista no sería capaz de resguardar mi espalda de tu dedo índice. Entonces preferí arrugarme y hacer de cuenta que creo en mi y en mi capacidad de desaparecer aún respirando. Es una ficción, un delirio detrás de otro para camuflar este falso y calmo estar en el que me sumerjo hasta que me falta el aire y salgo a flote con el pecho repleto de angustia, una canción en bucle y la pava hirviendo por ya tercera vez.
Voy a rodearme de brazos y piernas, escabullirme entre la piel hasta lograr creer que puedo desaparecer. Mediré los extremos de este lugar que habito con alevosía e intentare sujetar con fuerza la carne hasta poder deshacerla.

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